Por lo menos yo, ya estoy harto

Ya no recuerdo la última mañana que me desperte y al enterarme de las noticias del día no recibí un nuevo mazazo que me hiciese pensar que se ríen de nosotros.

Lo último ha sido hoy, que menudos días llevamos. Sitúo. Audiencia vasca; Otegui e Ibarretxe acuden a declarar. El primero pasea como un héroe por la calle bromeando. Y yo me pregunto: ¿qué puede sentir una persona que ha perdido un familiar? qué esperan que sienta cualquier persona que cree en la libertad, o ¿qué demonios significa que una sociedad tenga que bajar la cabeza ante asesinos? Si son necesarias las reformas estatutarias, qué las hagan. Los ciudadanos pagamos a los políticos para que trabajen, y esta es una labor de ellos. ¿Qué significa el espectáculo dantesco, que me dejo bociabierto, del otro día en la Audiencia Nacional con Otegui nuevamente? ¿Retirada de los cargos por el fiscal del estado..., y todo un despliegue previo bestial para nada. Pero, ¿qué sucede? ¿En que momento hemos llegado a esto? Supongo que se lo debemos al fiscal general del Estado. Yo me voy a unir a los vascos y catales y pido también un referendum. Quiero que me consulten qué quiero de mi país, de la Constitución, del cumplimiento de las condenas integras -se pongan o no de huelga- y de muchas otras cosas más.

¿Qué ha pasado con el secretario general del PSOE en Navarra? por el simple hecho de decir que no se puede permitir que su Comunidad sea moneda de cambio, va la dirección de su partido y le llama la atención. ¿Por qué no hablan de Montilla, Carod y Mas?

Agreden a un miembro del Foro de Ermua, asesinan ciudadanos, hacen lo que les viene en gana, y nosotros no podemos más que sentarnos en nuestras casas. De verdad, que todos los días me parece tener más motivos para levantarme indignado, pero nada comparado con las víctimas terroristas que ven a los asesinos de sus familiares por sus calles y tienen que vivir con eso. Espero que los que pueden cambiar esto y se cruzan de brazos duerman mal, al menos un día.